Elección subnacional, datos oficiales y lecciones aprendidas

Edgar Ramos Andrade

Con el respeto debido, discrepo con el criterio del maestro Carlos Hugo Molina en Página 7 (de 9 marzo 2021) y su análisis de las elecciones del 7 de marzo reciente. Motivo: Parece irresponsable analizar resultados electorales en base al conteo rápido de votos. ¿Por qué?
Quienes analizan la realidad públicamente (y me incluyo) debemos pensar, siempre que lo manifestado hacia el público es visto, leído y escuchado, por miles de personas. Y al conocer el criterio de gente altamente formada, como Carlos Hugo, puede generarse error al interpretar datos probadamente erróneos. A las pruebas me remito.

Prueba Uno: En Pando, la encuestadora Ciesmori indicó que el resultado final de la encuesta “Boca de urna” fue que el MAS ganó la Alcaldía de Cobija con 34% y MTS fue segundo con 32% (VER https://www.paginasiete.bo/nacional/2021/3/8/mas-gana-la-alcaldia-de-cobija-por-dos-puntos-sobre-el-mts-286708.html). El resultado de computo.oep.org.bo señala: al 97% de conteo oficial, MTS ganó con 45%, segundo MAS 32%. “Margen de error: 13%”…

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Error malintencionado de Ciesmori

Prueba Dos: En Trinidad, Ciesmori, excluyó al MTS de su lista de candidatos a Alcalde en su encuesta preelectoral porque el postulante Cristian Cámara “no está en Base de Datos” como indicó la señorita encuestadora desde el teléfono 75090885 (VER http://radiolider97.bo/noticia/4/12238/trinidad-cies-mori-excluy-de-su-encuesta-al-candidato-del-mts-cristian-cmara). Este hecho no fue desmentido por Ciesmori. Su silencio es atronador.

Lo de Ciesmori parece “error malintencionado”. Sus encuestas tienen graves errores de datos científicos y da lugar a diversas interpretaciones. Una es que la débil empresa encuestadora relativizó su “error” porque se trata de Trinidad, ciudad ubicada en la perdida Amazonía boliviana. Si fuera Santa Cruz de la Sierra (donde además vive Carlos Hugo) sería otra cosa.

Otra interpretación es que Ciesmori incurrió en discriminación, y direccionó (con malicia) el voto en Trinidad, aunque no sirvió de mucho. Otra vez, según dato oficial de computo.oep.org.bo en Trinidad cuando se escrutó el 98% de actas, el candidato del MTS Cristian Cámara ganó la elección con 28% seguido por la agrupación Todos 23%. Y así podríamos hacer más interpretaciones.

Tareas importantes

La primera tarea, importante, para analistas como Molina, dirigentes políticos como Evo Morales, gobernantes, candidatos y toda la prensa, es que debemos esperar resultados oficiales. Eso es responsabilidad elemental.

Otro ejercicio importante es no repetir lo que hace Morales –el ex presidente de educación incompleta que fugó del país– enviar mensajes triunfalistas basados en dudosas encuestas de boca de urna.

La tercera misión será que, todo consejo, sugerencia o recomendación pública a los futuros alcaldes y sus concejales, a los nuevos gobernadores y sus asambleístas es que se formen, urgente, en gestión pública. Probablemente, más del 90% de los candidatos y candidatas tengan poca noción de la responsabilidad que asumirán desde mayo próximo.

Lecciones urgentes

En la elección del domingo 7, aprendimos que:

a) Por lo predicho, no debemos confiar más en encuestadoras como Ciesmori, que erraron (con malicia o no) antes y después de la votación. Y esa distorsión ocasiona más distorsiones (involuntarias) en el votante, que se deja guiar, por encuestas erradas o por análisis apresurados como el de Molina.

b) Menos debemos confiar en la amplificada difusión de esas encuestas (previas y las de “boca de urna”) probadamente equivocadas. Unitel, como medio de comunicación, con propietarios explícitos (familia de los empresario Monasterios, como lo demostré en mi libro “Neoliberalismo Mediático”) y con directores de edición y difusión, es la responsable de esta enorme, e irreparable, irresponsabilidad editorial.

c) El voto ciudadano fue inducido, por malintencionadas encuestas, pre y post votación, y por coerciones, especialmente en el área rural donde los dirigentes apelaron a todo para obligar a votar por determinado partido. Como nos pasó con el “voto campesino” del MNR, hace más de media centuria.

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