La oposición denuncia fraude

Cómputo de votos confirma triunfo del MAS y Evo es presidente electo

Evo Morales ganó las elecciones del 20 de octubre con el 47,07% de los votos y una diferencia de 10,56% sobre el segundo, el expresidente Carlos Mesa. Los resultados, al 99,99% de actas, hacen innecesaria la realización de una segunda vuelta electoral. La oposición denunció fraude.

Morales logró una diferencia de 648 mil votos más que Mesa.

El conteo de votos se convirtió en accidentado después que la noche del domingo el Tribunal Supremo Electoral suspendiera la publicación de datos del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP). Esa noche, a las 19:40 con el 83,79% de las actas verificadas, había una distancia de 7,12% entre el primero y el segundo más votado, lo que anticipaba la realización de una segunda vuelta.

Esa interrupción fue interpretada como la prueba de manipulación por los sectores de la oposición, que a medida que llegaban los votos del área rural, donde Morales recibió mayor apoyo, veía que sus esperanzas de llegar a una segunda vuelta, en la que Morales tendría que enfrentarse a toda la oposición unida, se esfumaba.

Las acusaciones de fraude se multiplicaron y el candidato Mesa pidió a movilizaciones para defender la segunda vuelta, convocatoria que fue seguida por violentos incidentes en los que sectores de la oposición llegaron a provocar incendios de sedes de los Tribunales Departamentales Electorales y también quemaron el material electoral, entre ellos varias de las actas electorales.

Según los resultados conocidos, para ser oficial y final, debe repetirse la votación en cuatro mesas de Beni que fueron anuladas. Se prevé que la repetición se realizará el domingo 3 de noviembre.

 El fin del histórico MNR

Según los resultados del TSE, Morales ganó en los departamentos de La Paz, Potosí, Oruro, Cochabamba, Pando y Beni, mientras que Carlos Mesa ganó en Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija.

El tercer lugar de las elecciones fue ocupado por el candidato del PDC Chi Hyun Chung, quien con un discurso fundamentalista evangélico logró el 8,78% de votos. La agrupación “Bolivia dijo no”, de Oscar Ortiz, logró apenas el 4,24%, y el Movimiento Tercer Sistema, del gobernador de La Paz, Felix Patzi, apenas sumó el 1,25% de votos.

Las elecciones marcaron el final del histórico Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), cuyo candidato Virgilio Lema logró apenas 0,60% de votos. El último presidente por el MNR, Gonzalo Sánchez de Lozada, huyó de Bolivia a Estados Unidos, después del Octubre negro de 2003. Otros tres partidos también están condenados a desaparecer por no haber logrado el mínimo de 1% de votos. Ellos son el Pan-Bol que sumó 0,65% de votos, la Unidad Cívica Solidaridad que logró 0,41% de votos, y el Frente para la Victoria que apenas sumó el 0,39% de votos.

Auditoria de la OEA

Conocidas las primeras denuncias de fraude y manipulación, el gobierno pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) la realización de una auditoría de las elecciones. La posición fue apoyada por el TSE que considera que existen suficientes mecanismos de control para evitar la manipulación del voto popular.

Aun así, el 23 de octubre se conoció un informe preliminar de la misión de observadores de la OEA en la que, sin esperar el resultado del conteo, recomendaban la realización de una segunda vuelta. “En el caso de que, concluido el cómputo, el margen de diferencia sea superior al 10%, estadísticamente es razonable concluir que será por un porcentaje ínfimo. Debido al contexto y las problemáticas evidenciadas en este proceso electoral, continuaría siendo una mejor opción convocar a una segunda vuelta”, dice un informe.

Según las leyes bolivianas para ganar una elección en primera ronda se debe lograr a) el voto de más del 50% o b) un mínimo de 40% de votos válidos y una diferencia de más del 10% de votos con la segunda candidatura más votada.

Ese comunicado fue criticado por el gobierno de México que calificó a la misión de la OEA de apresurada. “El comunicado donde se calificó de manera apresurada la elección, sin proporcionar los fundamentos actuales y objetivos para tales aseveraciones, trastocó la imparcialidad y neutralidad de dicha misión e interfirió en un proceso electoral que no ha concluido y que compete resolver al pueblo y a las instituciones de Bolivia”, dijo la embajadora de México en la OEA Luz Elena Baños.

Más tarde el secretario general de la OEA, Luis Almagro, pidió esperar el informe de la OEA, para validar el triunfo de Morales.

Atrás