"LA GUERRA DEL GAS" EN BOLIVIA: Unidad de pobres, de indígenas, de excluidos y de obreros para diseñar una nueva Bolivia sin exclusión ni racismo El objetivo aymara Marina Ari, especial para Bolpress.com Son las 6:00 de la mañana del martes, 14 de octubre de 2003: Estoy escuchando una radio Aymara, están tocando una kullawita, las Kullawas son una tradicional música aymara, me llama la atención el tìtulo de esta pieza, se llama "La kullawa del Che", así es, es una canción dedicada al Ché Guevara, los músicos cantan: "Ustedes preguntarán quienes somos los rebeldes, jóvenes descontentos y buscando por igualdad....Palo palo a los malos, Waska, waska a los corruptos, fuera fuera con los pillos..., viva el Che Guevara" dice la kullawita.

"LA GUERRA DEL GAS" EN BOLIVIA: Unidad de pobres, de indígenas, de excluidos y de obreros para diseñar una nueva Bolivia sin exclusión ni racismo

El objetivo aymara

Marina Ari, especial para Bolpress.com

Son las 6:00 de la mañana del martes, 14 de octubre de 2003

Estoy escuchando una radio aymara, están tocando una kullawita, las Kullawas son una tradicional música Aymara, me llama la atención el tìtulo de esta pieza, se llama "La kullawa del Che", así es, es una canción dedicada al Che Guevara, los músicos cantan: "Ustedes preguntarán quienes somos los rebeldes, jóvenes descontentos y buscando por igualdad....Palo palo a los malos, Waska, waska a los corruptos, fuera fuera con los pillos..., viva el Ché Guevara" dice la kullawita. Esta letra no expresa la posición de los aymaras pero si ejemplifica que existe una diversidad de posiciones en el mundo aymara y una información profusa de diferentes corrientes de pensamiento. Los Aymaras estamos en conocimiento de diferentes posturas filosóficas y políticas pero fundamentalmente las generamos con un grupo naciente de intelectuales y líderes aymaras. Tenemos un pensamiento propio, diferente del pensamiento europeo. Somos, como la mayoría de hermanos Indígenas una nación pobre, pero muy avanzada en cuanto a objetivos, organización y principios.

Los criollos bolivianos siempre nos han considerado a los aymaras, como salvajes, casi animales similares a llamas, bestias incapaces de generar pensamiento. Al contrario los Aymaras provenimos de una gran cultura basada en la solidaridad, en la armonía entre las personas y con la naturaleza. En estas terribles circunstancias, una de las mayores masacres indígenas (La masacre de El Alto), antecedida por dos anteriores, (La Masacre de Warisata y la Masacre de Ventilla), la organización de los aymaras tanto rurales como urbanos ha sido admirable. Organización y solidaridad son las claves de nuestra cultura y estas se han aplicado en estos momentos de luto.

No sólo eso, la información es otra de las bases de decisión para la ulaka. La ulaka es el parlamento de Amautas (sabios, intelectuales y dirigentes Aymaras). No se puede desconocer que nuestros Mallkus y Mama T?allas (autoridades comunitarias masculinas y femeninas, existe equidad de género en la cultura Aymara) han iniciado esta movilización, la han mantenido y nos están dando la línea de lo que debemos hacer. La información se da básicamente a través de las radios aymaristas que difunden muy tempranito, desde las 5 de la mañana información en aymara.

Los sectores aymaras tanto urbanos como rurales hacemos evaluaciones y se generan estrategias a veces espontáneas pero que llevan el sello de la cultura aymara. Por ejemplo hoy hemos reflexionando sobre la jornada de ayer, sobre todo sobre el comportamiento del pueblo versus el comportamiento de los militares. Ayer a un grupo de soldados se les acabaron los gases lacrimógenos, la superioridad numérica de los manifestantes era mucho mayor, los soldados quedaron en minoría y al verse rebasados sin sus gases, entonces sacaron banderas blancas y los marchistas no los atacaron. Los alteños (aymaras urbanos) quienes eran parte gruesa de esa marcha, reflexionan y dicen que si hubiera sido al contrario, los soldados no hubieran dudado en masacrar a la gente indefensa. Es que hay una gran diferencia de culturas, nosotros los aymaras podemos sentir compasión del contrincante, el k?ara, el blancoide y el blanco no dudan en masacrarnos en terminar de la forma más cruel con nosotros. Nosotros somos profundamente pacifistas, pero también observamos la justicia como base de la paz. Los que nos odian no quieren ni paz ni justicia.

Por otra parte han aparecido los grupos de izquierda, que son sumamente débiles en Bolivia en estos momentos e intentan darnos la línea. Peor aún ellos han estado muy periféricamente en este movimiento, en ellos se está imponiendo su condición k?ara (blancoide) a su condición de revolucionarios y están pretendiendo dar línea sin conocer ni importarles lo que piensan los Mallkus y Mama T?allas que recogen las disposiciones de las comunidades y de las gentes Aymaras urbanas organizadas.

El ejemplo es Marcos Domic del partido comunista, que esta mañana (martes 14 de octubre de 2003) declaraba en Radio Integración que ayer se habían reunido varios partidos de izquierda y que coincidían en que la solución del conflicto pasaba por la expulsión de Sánchez de Lozada y la llamada a nuevas elecciones constitucionales con otros reglamentos.

Nosotros tenemos diferencias en cuanto a objetivos. El sentimiento y decisión del pueblo Aymara es efectivamente que Sánchez de Lozada se vaya. En respuesta a la campaña internacional que dice que esto es un golpe de estado, un proceso de subversión y otras mentiras más decimos que la decisión de que Sánchez de Lozada fue posterior a las masacres que realizó. Las ideas centrales fueron la defensa del gas y el derecho que tenemos los Indígenas, los obreros y el pueblo empobrecido de decidir que hacer y como con nuestros recursos naturales. Aclaramos también que nunca hubo un solo disparo del pueblo, en cambio el ejército está usando armas de guerra contra nosotros. Lo que hubo en El Alto es una masacre, lo que está pasando en La Paz es una masacre.

Balas y metralla y tanque y gases contra gente indefensa y profundamente pacífica, que intentó ejercer su derecho a opinar sobre un recurso natural.

Detrás existe una reivindicación mayor, es que cese el proceso de exclusión y racismo contra indígenas y afrodescendientes en Bolivia. Esto merece un cambio muy profundo en las instituciones bolivianas. Y pensamos que es hora de darse ese cambio. El ejemplo de que este movimiento no es golpe de estado sino todo lo contrario un proceso de masacre de Indígenas para acabarnos como parte de un proyecto racista es que el 99 por ciento de los muertos, heridos , presos y torturados en estas masacres, son aymaras urbanos y rurales empobrecidos. Incluso existen soldados aymaras ejecutados por oficiales blancos por no querer disparar contra sus hermanos, los dos soldados muertos ayer, tienen disparos en la cabeza! Y el pueblo no tiene armas.

Esta es la Sudáfrica sudamericana y los masacrados Indígenas y nosotros sus hermanos y hermanas de sangre y espíritu, pedimos un alto a esta masacre racista. Seguimos esperando el apoyo de los hermanos Quichuas, seguimos esperando el apoyo de los hermanos Indígenas del Oriente, sabemos que en el centro más racista de Bolivia, Santa Cruz, hubo un muerto de los hermanos campesinos que protestaban en contra de la "Masacre de El Alto" y estamos conmovidos por su apoyo porque los Indígenas del oriente han sufrido exterminación y aún viven en esclavitud, aún así han apoyado. Los empresarios privados Cruceños han amenazado con que no permitirán que Santa Cruz se convierta en una réplica de La Paz. Por supuesto nosotros los Qullas, los Aymaras ya no soportamos la esclavitud y es más tenemos una organización que incluye a pequeños empresarios privados Aymaras que en su mayoría apoyan a nuestros hermanos de sangre. En cambio en Santa Cruz todavía se mata a los indígenas peor que a animales, se les despoja de su territorio, se violan a las mujeres y son objeto de mil abusos de los poderosos que argumentan superioridad racial. Sin embargo las mayorías en Santa Cruz y Tarija (otro centro racista) son como nosotros, gente pobre y gente indígena, ellos nos tienen que apoyar. Tenemos el apoyo tambien de los "cholos" o mestizos conscientes, ellos son fruto de exclusión como nosotros. Deben sentirse orgullosos y no humillados de tener origen Indígena.

Esta es la Sudáfrica sudamericana y como Sudáfrica debe cambiar. Los aymaras, gente empobrecida, obreros, somos gente de paz pero también de justicia, pedimos que cese la masacre, cese la exterminación racista en contra nuestra, los Indígenas unidos somos el 80% de este país. Hemos empezado con una huelga de hambre de más de 22 días, con medidas pacíficas y hemos recibido burla, bala y exterminio. Este país, donde ustedes dicen que no tenemos ningún derecho, ni siquiera el derecho a la vida, es nuestro señores racistas y asesinos blancos del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada. Dejen de exterminarnos, sus manos están manchadas de sangre.